miércoles, 24 de septiembre de 2008

Y si...

Y si… Me equivoque. No voy a ocultarlo, ni a excusarme o discutir. Lisa y llanamente me ocupe de que todo “ya no importe”. Reconozco mis errores y me hago cargo de las consecuencias que trajeron aparejadas. Pero… como termine en esta posición..? hay muchas respuestas pero fundamentalmente fue la inexperiencia en el campo, el querer quedar bien con todo el mundo y no tener la flexibilidad en actos lícitos y/o ilícitos para llegar a eso. En otras palabras, no se manejar este tipo de situaciones y me di cuenta que no quiero aprender a manejarlas… Hieren mi alma y las de muchos más. La gran diferencia radica en que yo me permito herirme, abrazarme al dolor y estrujar mis sentidos, pero no voy a empujar a nadie más hacia la oscuridad, por lo que… mi idea de apartarme de todo para no hacer daño, toma mas fuerza aun.

Si ya no importa, ya no existe… Pero si ya no existe… nada subsiste..? (al cuestionar esto me encuentro conmigo mismo en el lugar que me siento cómodo, en donde prefiero estar, en donde la idea le gana a la forma, y en donde siempre le ganará). Y la respuesta a esta incertidumbre de subsistencia atropella mi ser: evoquemos la situación de una persona que queda sin vida… que sería lo que perdura de ella..? Acaso no paso a ser gusanos sumergidos en la tierra..? Entonces la conclusión es que… Nada subsiste..? Sin perder el pulso, me atrevo a refutar. Dilucidando que en definitiva hay una permanencia comprobable cuando nos esfumamos del mundo terrenal y esta es simplemente la parte de nosotros que le permitió a otra alma ver, tocar, enseñar, asimilar, descubrir, marcar, reflejar... Traducido en cualquiera las formas de comunicación, pero transferido de la manera correcta. Básicamente… ESO ES LO QUE SUBSISTE. Solo perdurara en el tiempo lo que supimos transmitir, lo que le dejamos a otras almas.

Porque recurro a esta idea..? Porque muchas veces dije la frase… “nunca pases por la vida de nadie si no vas a dejarle algo”. Ese es mi fin exterior y el que pienso mantener. No quiero ni cambiar el mundo, ni plantar un árbol, ni escribir un libro y menos que menos… cambiar a las personas. Simplemente en las circunstancias en que dejo de existir para un alma deseo que perdure algo en el mundo de sus ideas, de sus sentires si es posible. Por mas ínfimo que sea, por mas simple que le pueda llegar a resultar… Es ese algo el que me da aire para respirar en esta realidad sumergida en naderías.

Y yo pasé… y espero haber dejado… Sin que me tiemble el pulso te aseguro que lo que mas deseo es haber dejado. Porque en acción inversa a todas las historias… podes haber descubierto que lo que es ceniza puede ser chispa y de repente sin darte cuenta ser un alma que puede asomarse de la oscuridad a ver la luz… Y que no solamente vivir para iluminar a los demás. Tal vez en otra historia esa chispa que te nombro se pueda volver llama, tal vez espero hoguera, quien no dice… Ojala pueda ver el universo incendiarse con tu fuego… Porque te alcanza… Porque te sobra para lograrlo.

Todo esto haría que… aunque mi corazón este rasgado, mi mente estaría tranquila. Y como es común en mí, para cada “acorde” tengo una canción, en realidad la música en si lo tiene. Para cada sensación existe una musicalización. Con la salvedad de que no planeaba entregarte esta sensación, porque no le suma a mi persona.... Pero dada la situación es tuya. Espero a vos te sume.

Buena vida… Orgulloso haber respirado de tu aire.

M.A.

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