Lo se... Es un tema gastado... Es un tema tratado... Pero es una de las más grandes traiciones hacia nosotros mismos si no aprendemos a hacerlo.
Desde los budas y su sabiduría hasta las más insípidas relaciones sentimentales este tema se presenta como trivial... DAR SIN ESPERAR RECIBIR. Es mas que claro que partiendo de nuestros más profundos brotes intuitivos humanoides siempre que se brinda algo sean formas, ideas o sentimientos esperamos una retroalimentación positiva de cualquier índole sea por parte del beneficiado o por un supuesto equilibrio natural. Hasta en el caso de la solidaridad surge esta indirecta idea de recibir.... Todo aquel que por responsabilidad social o religiosa otorga ayuda, de manera inconsciente esta esperando un feedback… “Dios me va a llevar al cielo”, “el ayatolá me va a beneficiar”, “mi empresa esta norma va a certificar” o “menos impuestos vamos a pagar”...
En el caso de las relaciones sentimentales... Este problema muchas veces define la importancia de uno con respecto al otro... Frases como "Vivo mi vida para vos y esto es lo que me das???", "Yo no hice nada para merecer esto", "La relación se hace de a dos si no sirve"; son grandes ejemplos de que estamos dando esperando recibir lo mismo o porque no? mas por parte del otro. En muchas oportunidades se termina en un sinfín de comparaciones tratando de equiparar lo que doy con lo que me dan, puesto que si, mi planilla del debe y el haber llegó al punto de estar en rojo en la columna del recibir, la relación se desestabiliza.
Gente... En todos estos aspectos estamos equivocados y me incluyo fuertemente en esta reflexión... El hecho de DAR SIN RECIBIR no es solo filosofía... Es una necesidad. Porque..? Muy simple... Uno da cuando quiere dar, cuando siente que el otro merece... Y hasta ahí llega la rueda... Eso te debe llenar de gozo... Te debe hacer feliz... Punto y Aparte… La respuesta del entorno hacia tu acción no tiene que importar, a excepción que no lo hayas hecho con un fin puro... Que simplemente lo hagas con la finalidad recibir... Ahí curtite...
Los que damos porque sentimos que queremos dar, no esperemos recibir... Simplemente disfrutemos un rostro de alegría, nutrámonos de la acción porque eso es lo que cuenta... No debe seguir la historia, es hasta ahí y nada mas... Seamos puros... Seamos seguros... La reciprocidad en la pareja es una realidad a largo plazo y si no existe no va a funcionar…. Y si no funciona es porque no son dignos de estar a tu lado o simplemente NO ES… Pero esto, se da solo, mientras nosotros nos estamos ocupando de vivir la cotidianeidad.
Cotidianeidad… Je! Vivir el momento es algo tan plano como efectivo… Admiro a quien lo hace.
M.A.
Desde los budas y su sabiduría hasta las más insípidas relaciones sentimentales este tema se presenta como trivial... DAR SIN ESPERAR RECIBIR. Es mas que claro que partiendo de nuestros más profundos brotes intuitivos humanoides siempre que se brinda algo sean formas, ideas o sentimientos esperamos una retroalimentación positiva de cualquier índole sea por parte del beneficiado o por un supuesto equilibrio natural. Hasta en el caso de la solidaridad surge esta indirecta idea de recibir.... Todo aquel que por responsabilidad social o religiosa otorga ayuda, de manera inconsciente esta esperando un feedback… “Dios me va a llevar al cielo”, “el ayatolá me va a beneficiar”, “mi empresa esta norma va a certificar” o “menos impuestos vamos a pagar”...
En el caso de las relaciones sentimentales... Este problema muchas veces define la importancia de uno con respecto al otro... Frases como "Vivo mi vida para vos y esto es lo que me das???", "Yo no hice nada para merecer esto", "La relación se hace de a dos si no sirve"; son grandes ejemplos de que estamos dando esperando recibir lo mismo o porque no? mas por parte del otro. En muchas oportunidades se termina en un sinfín de comparaciones tratando de equiparar lo que doy con lo que me dan, puesto que si, mi planilla del debe y el haber llegó al punto de estar en rojo en la columna del recibir, la relación se desestabiliza.
Gente... En todos estos aspectos estamos equivocados y me incluyo fuertemente en esta reflexión... El hecho de DAR SIN RECIBIR no es solo filosofía... Es una necesidad. Porque..? Muy simple... Uno da cuando quiere dar, cuando siente que el otro merece... Y hasta ahí llega la rueda... Eso te debe llenar de gozo... Te debe hacer feliz... Punto y Aparte… La respuesta del entorno hacia tu acción no tiene que importar, a excepción que no lo hayas hecho con un fin puro... Que simplemente lo hagas con la finalidad recibir... Ahí curtite...
Los que damos porque sentimos que queremos dar, no esperemos recibir... Simplemente disfrutemos un rostro de alegría, nutrámonos de la acción porque eso es lo que cuenta... No debe seguir la historia, es hasta ahí y nada mas... Seamos puros... Seamos seguros... La reciprocidad en la pareja es una realidad a largo plazo y si no existe no va a funcionar…. Y si no funciona es porque no son dignos de estar a tu lado o simplemente NO ES… Pero esto, se da solo, mientras nosotros nos estamos ocupando de vivir la cotidianeidad.
Cotidianeidad… Je! Vivir el momento es algo tan plano como efectivo… Admiro a quien lo hace.
M.A.
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